Durante 2019 PDLF refuerza su compromiso con la educación
En el inicio de un nuevo ciclo académico, la institución seguirá promoviendo la educación como factor fundamental para que la familia tenga mayores oportunidades y mejore su calidad de vida.
Para Patrimonio de la Familia el 2018 fue un gran año, debido a que sus esfuerzos por consolidarse en el ámbito de la educación sembraron sus frutos, entre otras razones, por ser reconocidos públicamente, y en conjunto con su socio estratégico Audax Italiano, con el “Premio Promoción de Valores” otorgado por la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), en razón del proyecto social desarrollado por ambas instituciones desde hace más de una década y cuyo objetivo es contribuir a la movilidad social, mediante la implementación de talleres que procuran un mayor involucramiento de padres y apoderados en la educación de sus hijos.
Este reconocimiento, viene a coronar un esfuerzo mancomunado que ha comprendido diferentes etapas y procura trabajar para que la familia vuelva a ser protagonista en el aprendizaje de sus hijos. Pero la distinción es sólo un aliciente, y no un fin en sí mismo, para seguir apoyando a miles de padres y madres de diversas comunas de la región Metropolitana, mediante programas y talleres de capacitación que buscan apoyar el desarrollo del aprendizaje escolar e instalar hábitos de estudio en los niños, fortalecer los vínculos entre padres e hijos y afianzar la relación familia-escuela, con el fin de que los estudiantes lleguen mejor preparados al desafío de acceder y egresar de una carrera profesional.
En este nuevo año académico, Patrimonio de la Familia refuerza su compromiso irrestricto de apoyar a quienes creen en el poder transformador que la Educación posee como motor principal de la Movilidad Social. Según cifras de la institución, al día de hoy, se ha logrado impactar a más de 25.000 personas. Tan sólo el 2018 se sumaron a ese creciente número más de 260 apoderados y 133 docentes, cumpliendo estos últimos un rol esencial en la formación de los estudiantes, a quienes se les entregaron valiosas herramientas que buscan optimizar el aprendizaje y rendimiento académico de niños y niñas de enseñanza básica y media, entendiendo que una familia preparada para acompañar el proceso educativo de sus hijos, alcanza finalmente una mejor calidad de vida y mayores oportunidades para su futuro.